Os dijeron que una Cataluña independiente no saldría de Europa, y lleváis meses escuchando de todos los lideres europeos que tendréis que poneros a la cola para volver a entrar.
Os dijeron que las empresas no temían la independencia, y están huyendo en tropel.
Os dijeron que esta sería la independencia mejor preparada de la historia y que todo estaba perfectamente preparado, y de las escuchas judiciales se desprende que ellos sabían que no era así.
Os dijeron que erais la mayoría social y no la tenéis en votos, aunque sí, pero exigua, en escaños.
Os dijeron que en la escuela no se adoctrina y os estáis hartando de ver imágenes y grabaciones de críos coreando consignas y pintando esteladas.
Os dijeron que la independencia era para huir de la corrupción española, eso resulta que la Generalitat es el máximo exponente de corrupción organizada desde la propia institución y hasta desde la más emblemática familia presidencial.
Os dijeron que hubo mil heridos y al día siguiente había cuatro personas ingresadas, y los más emblemáticos de entre esos “heridos” se han revelado falsos.
Os dijeron que seríais el país más pacifista del mundo, sin fuerzas armadas, y ahora se sabe que estaban trabajando en la creación de un ejército.
Os dijeron que nada podría pararos y dos autos judiciales han hecho renegar a la mayor parte de vuestros líderes.
Os pidieron que os movilizaseis sin miedo y vuestro líder ha huido dejando en la estacada a los suyos y otros andan mendigándoos donativos para pagar las fianzas.
Os dijeron que los recortes eran culpa de España y ahora se está desvelando que la Generalitat despilfarraba cada mes 660 millones de euros en el proceso separatista que podían haberse destinado a mejoras sociales.
Os dijeron que la banca se pelearía por estar en Cataluña y las principales entidades locales han huido.
Os dijeron que la nueva república nadaría en la abundancia y las fugas de empresas echan por tierra todos los cálculos de ingresos fiscales, ya de por sí fantasiosos.
Os dijeron que las calles eran vuestras y os hemos demostrado que no es así, que somos al menos tantos como vosotros.
Os dijeron que odiábamos a Cataluña, pero nos manifestamos luciendo indistinta y orgullosamente la senyera y la bandera española, mientras vosotros habéis adoptado una enseña ajena a la historia de Cataluña.
Os dijeron que la vuestra era una “revolución de las sonrisas” y vuestros mensajes y acciones destilan odio, rencor y supremacismo.
Os dijeron que en cada Diada sacabais a la calle dos millones de manifestantes, y los cálculos objetivos demuestran que es físicamente imposible que fueseis más de la tercera parte de esa cifra.
Os dijeron que la independencia os llevaría a una república ejemplar y moderna y vais camino de una sociedad revolucionaria controlada por las CUP.
Os dijeron que la Unión Europea jamás expulsaría a Cataluña, pero resulta que sois vosotros los que queréis iros, y que sí quisieseis seguir circulando como ciudadanos europeos tendría que ser utilizando el pasaporte español.
Os dijeron, os dijeron, os dijeron…
¿Hasta cuándo vais a permitir que os sigan diciendo sin reaccionar ante tanta mentira?